La Comisión Europea (CE) ha dado un ultimátum a España para que afronte, de una vez por todas, la contaminación de las reservas de agua subterráneas por nitratos, residuos de origen ganadero producidos especialmente por la industria agroalimentaria.
La mala aplicación de estos desechos (purines), usados como fertilizantes en los campos, o su vertido indiscriminado hacen que se infiltren en el terreno y contaminen las aguas subterráneas.
El resultado es un aumento constante de las zonas afectadas en Catalunya y en otras comunidades. La Generalitat ultima una orden con una nueva ampliación de las zonas contaminadas (vulnerables). La Comisión ha emitido un dictamen motivado en el que se recogen los incumplimientos en que incurre la práctica totalidad de comunidades en relación a la directiva de nitratos, que exige a los estados europeos designar o actualizar las zonas afectadas, hacer un seguimiento de los puntos de control y aplicar programas de acción (revisados cada cuatro años) para combatir el problema
Una orden ampliará a más de 400 municipios las zonas afectada que deben ser protegidas
Y, en caso de no obtener una respuesta favorable, puede remitir el asunto al Tribunal de Justicia de la Unión Europea. La Comisión ya remitió una carta de emplazamiento en noviembre del 2018 como primer paso en el procedimiento de infracción abierto.
El documento señala que, a pesar de haber detectado algunos avances, éstos no son suficientes. Por eso reclama al Gobierno español que envíe información con todos los elementos de los programas de acción contra los nitratos y que se adopten “medidas adicionales o acciones reforzadas” para alcanzar los objetivos que marca la directiva.
El Govern aprobó en julio del 2019 un decreto para mejorar el majeno de los pruines con nuesvas exigencias
En Catalunya, el dictamen detecta dos fallos: una insuficiente designación de zonas vulnerables (suelos contaminados) y carencias en el seguimiento histórico y de trazabilidad de los datos que arrojan los puntos de medición, lo que impide un correcto control a lo largo del tiempo.
Fuentes de la Agència Catalana de l‘Aigua (ACA) indicaron que en breve se aprobará la orden conjunta (de los departamentos de Territori i Sostenibilitat y Agricultura), que ampliará las zonas contaminadas (vulnerables), de forma que más de 400 municipios catalanes estarán afectados por las medidas de protección.
La orden salió a información publica en su momento pero la pandemia paralizo el proceso, que debe competarse ahora.
“Y creemos que podemos convencer a la CE de que nuestra red de control sí es correcta”, añadieron las mismas fuentes.
El Govern (Presidència) aprobó en julio del 2019 un decreto con normas para el buen manejo de los residuos ganadero como fertilizantes y un programa de actuación para las zonas contaminadas por nitratos. “Esperamos que esta vez las medidas sí sean eficaces; aunque la contaminación tiene mucha inercia”, señalan fuentes del ACA.
El decreto establece que no habrá nuevas explotaciones de cerdos o ampliaciones en las zonas contaminadas, pero incluye diversas excepciones (en los casos en que el ganadero tenga tierras propias para dejar los purines, si los entrega a un gestor, si los lleva fuera de Catalunya…)
“Se han puesto condiciones estrictas y no todo el mundo las puede cumplir, porque no hay tierras suficientes (para aplicar los purines); hemos rechazado solicitudes”, resalta Elisenda Gillaumes, directora general de Agricultura i Ramaderia.
El Departament habla de «moratoria de dos años» prorrogable
Guillaumes dice que 65 municipios están bajo un muy estricto régimen “de moratoria” de dos años que puede ser prorrogada dos años más si no hay resultados.
El dictamen de la UE desvela que casi todas las comunidades (excepto Cantabria y Asturias) presentan incumplimientos de la directiva. Algunas ni siquiera han designado las zonas vulnerables aunque la directiva es del año 1991.
Fuente de Información La Vanguardia